- Por desgracia, el cannabis medicinal no tiene status legal en España, de modo que si quieres disfrutar de sus más que estudiados beneficios en el tratamiento de un número considerable de enfermedades y trastornos, no te queda otro remedio que automedicarte.
- Para ello, tienes dos opciones: acudir a un buen proveedor (afortunadamente, España empieza a autoabastecerse gracias a los aguerridos cannacultores privados) o cultivar tú mismo. En ambos casos te conviene conocer las diferencias entre las dos principales especies de cannabis psicoactivo -Índica y Sativa-, para elegir la que más se adecúe a tu problema.
Las variedades de Índica (contenido en THC de medio a alto, contenido en CBD comparativamente alto), suelen tener un efecto psicoactivo de carácter sedante, con ese colocón que los angloparlantes llaman "stoned" (petrificado) y que relaja cuerpo y mente reduciendo la tensión muscular.
Estas cualidades la hacen más adecuada para enfermedades como:
- Esclerosis múltiple (reduce los espasmos y temblores)
- Enfermedad de Parkinson (por la misma razón)
- Artritis y reúma(combate el anquilosamiento y la inflamación)
- Insomnio (por sus efectos relajantes)
- Ansiedad (identica razón)
Las variedades de Sativa (contenido en THC de medio a alto, contenido en CBD comparativamente bajo), producen un efecto más activo y euforizante. Es un "subidón" tanto físico como mental que tiende a estimular más que a sedar.
Son más eficaces para tratar problemas médicos como:
- Náuseas y vómitos, por ejemplo, los provocados por quimioterapia o medicación contra el SIDA
- Pérdida de apetito (distiende el estómago y estimula el hambre)
- Migraña (reduce o elimina por completo el dolor)
- Depresión clínica (produce bienestar psíquico y sensación de euforia)
- Dolor crónico (por sus propiedades analgésicas). Para este trastorno funcionan también las Índicas, por lo que podrían ser muy adecuadas las variedades híbridas.
Estas variedades híbridas son interesantes para determinados casos, porque la combinación de Sativa e Índica suaviza las aristas de ambas, generando una psicoactividad más reducida, y por tanto, un colocón más leve. Por otra parte, sus efectos beneficiosos pueden verse también reducidos, así que no siempre funcionan igual que las variedades puras.
Pero también se puede optar por combinar ambas variedades en función de sus efectos para nuestra vida cotidiana. Es mejor utilizar variedades de Sativa durante el día, cuando su acción más estimulante te permitirá mantenerte despierto y alerta y desarrollar tus actividades normales; en cambio, las Índicas van mejor para la noche, para que sus efectos relajantes favorezcan el descanso y el sueño.
Hoy en día, se están desarrollando innumerables variedades con alto contenido en CBD, con el propósito de que en el futuro se pueda utilizar cannabis medicinal sin "colocarse". Por ejemplo, el conocido colectivo CBD CREW, en colaboración con DINAFEM, han creado dos nuevos híbridos de variedades de cannabis ricas en CBD, buscando siempre el ratio de 1:1 entre CBD y THC y que serán comercializadas este mismo febrero.
Elijas la que elijas, puedes estar tranquilo. A pesar de la absurda condena oficial que arrastra esta bendita planta, y por más esfuerzos que se han hecho para demostrar su "peligrosidad", nadie ha logrado aún encontrar la dosis mortal de cannabis.
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