- La conservación de nuestro planeta se ha convertido en un tema de actualidad de gran relevancia, y ello nos hace pensar que es el momento de empezar a aplicar métodos de cultivo ecológicos que favorezcan el respeto del medio ambiente.
- Este artículo versa sobre el té de compost, una solución que alimenta, equilibra y protege las plantas de marihuana de forma totalmente natural.
- Te presentamos los beneficios del uso del té de compost en el cultivo de marihuana. Además te damos una serie de consejos para que prepares tu propio té de compost de forma orgánica y artesanal.
¿Qué es el té de compost para el cultivo de marihuana?
El té de compost es una infusión capaz de alimentar y de proteger el cultivo de marihuana. Contiene una gran cantidad de ingredientes orgánicos provenientes del compostaje (habitualmente desechos orgánicos domésticos), muy eficaces a nivel biológico en el suelo.
De hecho, el té de compost mejora significativamente la actividad biológica del suelo, y fomenta considerablemente su oxigenación y su equilibrio estructural a nivel general. Esto se produce por el efecto de una serie de mecanismos biológicos, inducidos directamente por los microorganismos vivos (bacterias, hongos, protozoos y nematodos), que provocan la descomposición de los vegetales.
Además, estos microorganismos provocan una sinergia natural que permite hablar de "vida del suelo", donde se establecen procesos biológicos bien ordenados. La naturaleza hace las cosas muy bien y aquí nos lo demuestra de nuevo.
Por un lado, las plantas reciben todos los nutrientes necesarios para su correcto desarrollo, y por otro, el té de compost juega un papel protector importante, especialmente a nivel de la zona radicular, lo que ayuda a reducir la aparición de hongos o plagas nocivas.
Se puede utilizar té de compost oxigenado (TCO) o té de compost con aireación activa (TCAA), una infusión orgánica, líquida y fermentada, preparada a partir de ingredientes orgánicos previamente compostados que, además, incluye oxígeno.
Ventajas del té de compost para las plantas de marihuana
Principales beneficios del té de compost:
- Mejora el equilibrio general de la vida del suelo (estructura, oxigenación).
- Crecimiento vigoroso de las plantas de marihuana.
- Incrementa la velocidad de asimilación de nutrientes.
- Reduce significativamente el riesgo de aparición de hongos y de plagas.
- Cero presencia de pesticidas.
- Múltiples usos (eficacia para problemas fúngicos, carencias, bacterias, crecimiento, floración, etc).
- Método 100% biológico, respeto máximo de la naturaleza y del medio ambiente.
- Fácil de preparar y barato.
Ingredientes necesarios en la preparación del té de compost
Para preparar un buen té de compost se necesitan los siguientes ingredientes y materiales:
- Un recipiente para preparar y almacenar los ingredientes del té de compost oxigenado (TCO). Lo mejor es utilizar un modelo resistente, provisto de un grifo para mayor comodidad. Su capacidad debe ser un 25% mayor que la cantidad de té que queremos preparar. Los contenedores de lluvia pueden servir para cultivos pequeños o medianos (200-300 L). Normalmente, los cultivadores de marihuana a pequeña escala (1 o 2 m2) necesitan un contenedor con una capacidad máxima de 30 L. En cuanto a los cultivos de mayor envergadura (1 ha) es necesario un contenedor con una capacidad de alrededor de 1500 a 2000 L.
- Una malla filtrante de alrededor de 400 µ, con una capacidad grande, en la que quepa toda la materia orgánica compostada, así como los abonos necesarios para su preparación. Esta liberará directamente en la solución microorganismos y otros elementos naturales prolíficos .
- Una bomba de oxígeno de aquarium de buena calidad, con una capacidad mínima de 300 L/hora, que permitirá la producción de entre 15 y 20 L de té de compost, y que favorecerá el aporte de oxigeno a la solución.
- Una bomba mezcladora para que la preparación de té de compost sea homogénea.
- Una regadera o dispositivo de riego adaptado a las dimensiones del cultivo.
- Un calentador de aquarium (opcional) para acelerar la actividad de los microorganismos mientras se calienta la solución.
- 250 ml de melaza verde biológica.
- 10 L de compost orgánico de buena calidad, preferiblemente de elaboración propia. Lo más importante es asegurarse de que haya madurado por completo y esté bien descompuesto. Si no, como alternativa, podrás hacerte en el mercado con un compost ya preparado, pero no dudes en decantarte por el compost casero ya que siempre es de mejor calidad.
- 10 L de agua sin cloro. Se puede utilizar un filtro para extraer el exceso de cloro del agua o dejarla al aire durante 24-30 horas para que el cloro se evapore. Te recomendamos un pH neutro o con un valor cercano al 7.
Cómo preparar el té de compost
La preparación del té de compost requiere varias fases:
- Meter 10 L de compost en el fermentador (recipiente de preparación con una capacidad mínima de 25-30 L) y verter poco a poco 10 L de agua sin cloro.
- Añadir la melaza biológica (250 ml).
- Mezclarlo todo con energía para que los ingredientes orgánicos se fusionen con mayor rapidez y se desencadene la simbiosis natural de los microorganismos. Es necesario mezclar de forma manual o con una bomba hasta que los ingredientes sólidos queden en suspensión. Controlar que la temperatura del agua se mantenga entre los 18 y los 22ºC.
- Dejar fermentar durante unas 24 horas (té bacteriano) aportando oxígeno a la solución con cierta frecuencia (15-20 mn/h) con una bomba de oxígeno. Durante esta fase, la circulación del agua a través de la materia orgánica compostada, gracias a la acción de la bomba, hace que circulen el agua o el aire, lo que permite que los microorganismos pasen de un medio al otro. Es necesario alternar la bomba de mezcla (10-15 mn/h) con la bomba de oxígeno, de tal forma que el té de compost permanezca homogéneo y se mantenga perfectamente oxigenado. Luego, tras apagar la bomba, hay que dejar reposar el té entre 10 y 20 minutos, y finalmente filtrarlo. Cuando la capa de espuma que se forma en la superficie de la solución desaparece significa que el té de compost está listo para su uso. El siguiente paso consiste en aplicar el té en las plantas, mediante pulverización foliar o directamente sobre el sustrato con el riego.
- Un té de compost de buena calidad debe desprender un olor agradable, similar al de una mezcla de tierra y levadura. Si persiste el mal olor, significa que el té no está lo suficientemente aireado, que la solución no se ha diluido (exceso de compost), que existe una carencia de microorganismos activos (añadir melaza), que no se ha mezclado lo suficiente, o que se ha almacenado durante demasiado tiempo. Se debe utilizar durante las 4-6 horas siguientes a su preparación. Es posible conservarlo un poco más de tiempo en un lugar frío, mezclándolo y aportando oxígeno de forma regular (15 h máximo), pero es mejor evitarlo. Es preferible realizar una nueva preparación en caso de tener la menor duda sobre su viabilidad.
- Tiempo de preparación: para preparar un té de compost "bacteriano" hay que estimar unas 24 horas. Para un té de compost "fúngico", entre 24 y 36 horas. Para un té de compost "protozoario estabilizador", unas 48 horas.
- Frecuencia de aplicación: 2 veces al mes si es solo compost, sin plantas ni complementos, para equilibrar el suelo, y 3 veces por semana si se trata de compost, con plantas y complementos, para fertilizar.
- Nunca hay que utilizar productos que no estén totalmente descompuestos ya que podrían desarrollar patógenos.
Preparación de té de compost enriquecido
A medida que vayas evolucionando como cannabicultor podrás utilizar recetas más elaborada que incluyen espirulina, biochar, alga kelp, hidrolizado de pescado o bacterias solubles. El azomite micronizado cubre todas las necesidades en oligoelementos, la sal de Epsom permite gestionar las carencias de magnesio y la zeolita de tipo chabasita ayuda a estabilizar el té. Cada uno de estos elementos puede estar presente en la composición del té en una proporción de entre un 0,1 y un 1%.
En cualquier caso, hay que vigilar la concentración de los diferentes ingredientes (ratio/cantidad total de compost en relación a la cantidad de agua), así como la cantidad de microorganismos vivos presentes, la aireación y su conservación. Un aporte excesivo de ingredientes generaría una fermentación anaeróbica (falta de oxígeno) y esto favorecería la proliferación de plagas y enfermedades perjudiciales. Es preferible ser prudente a la hora de experimentar, y hacerlo poco a poco en función de la evolución de tus experiencias personales.
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