¿Qué es el cannabis sativa?

A la hora de seleccionar qué variedad de marihuana es la ideal para tus necesidades, es bueno comprender que generalmente se suele hablar de tres tipos diferentes de clasificaciones en el cannabis: sativa, indica e híbridos.

Las variedades sativa e indica ofrecen sus propias características y perfiles de cannabinoides, mientras que los híbridos combinan las características de ambas. Así que cuando cultives o compres una variedad de marihuana, encontrarás que está claramente etiquetada como sativa o indica, dependiendo de las características de la variedad que sea más dominante.

Diferencia entre indica y sativa

Para entender la diferencia entre sativa e indica la regla general que se aplica es que las sativas son más vigorizantes y energizantes, mientras que las índicas son más relajantes. Pero en realidad no es tan simple. Las plantas producen efectos variables, incluso entre el mismo tipo de cannabis. Todo depende de la dosis utilizada, de la composición química de la planta, del tipo de usuario e incluso de la técnica de cultivo.

Así, si observamos los "ingredientes" químicos dentro de las índicas y sativas, es decir, terpenos y cannabinoides, no hay patrones claros para explicar por qué un tipo sería sedante y el otro vigorizante. Lo que sí sabemos es que las variedades de cannabis indica y sativa se ven y crecen de manera diferente.

Nombre científico de la marihuana sativa

Sativa han sido la base del léxico del cannabis desde 1753, cuando el botánico sueco Carl Linnaeus identificó las plantas de cannabis psicoactivas como Cannabis sativa en su trabajo 'Species Plantarum'; 32 años después, el biólogo francés Jean-Baptiste Lamarck identificó al Cannabis indica como una especie diferente mientras observaba las características físicas de las plantas de cannabis de la India.

Lamarck argumentó que las plantas de Cannabis indica tienen hojas anchas de color verde oscuro en comparación con las hojas de Cannabis sativa, que son claras y estrechas. Posteriormente, en 1930, el botánico ruso Dmitrij Janischewsky identificaría Cannabis ruderalis como la tercera subespecie.

Así Cannabis sativa se identificó primero, usando el término latino "sativa" (satīvus), que significa que era una planta cultivada intencionadamente por humanos, principalmente en Europa y el oeste de Eurasia, donde se plantaba por su fibra y semillas.

Cannabis indica recibió su nombre por sus orígenes botánicos cerca del río Indo, cerca de las montañas de los que los griegos llamaban el Cáucaso Indicus, lo que hoy sería la cordillera del Hindu Kush, al oeste del Himalaya.

¿Cómo reconocer una marihuana sativa?

Hoy en día se utiliza la denominación Cannabis sativa para determinar una especie de cannabis que incluye variedades de marihuana y cáñamo procedentes de climas más cálidos y secos, con largos días soleados.

Así las genéticas sativas se originaron en los países ubicados en o cerca del ecuador, como Jamaica, Colombia, México, Tailandia o el sudeste asiático. Y aún hoy en día crecen silvestres en muchas zonas húmedas y tropicales del mundo.

1. Morfología

Todo esto nos ayuda a entender por qué la estructura de una planta de marihuana sativa es abierta y aireada, y que no se trata de un hecho casual.

Un factor distintivo que se presta para una fácil identificación entre sativa y otras subespecies es su estatura majestuosamente alta y algo larguirucha, un auténtico árbol de marihuana con ramas que se extienden y crecen hacia arriba, mientras que sus hojas dispuestas en forma de palma son largas y estrechas.

A diferencia de las índicas donde las flores de la planta se agrupan alrededor de los nudos, en las plantas de marihuana sativa las flores comienzan en sus nudos y se expanden a lo largo de los tallos.

El objetivo es evitar la acumulación de humedad y la aparición de patógenos, así como ofrecer una buena ventilación en las épocas calurosas. Además, una estructura abierta es una ventaja de cara a afrontar vientos fuertes. La delgadez de los folíolos también permite reducir la transpiración y asegura una buena ventilación en días calurosos.

2. Floración y producción

Las plantas de marihuana sativa tienen períodos vegetativos mucho más largos que las índicas, y tardan entre 10 y 16 semanas en madurar completamente durante el período de floración. Y es que las plantas sativas se han adaptado para seguir creciendo a medida que florecen como resultado de originarse en regiones ecuatoriales, donde el conjunto de genes estuvo expuesto a una cantidad de luz anual casi inmutable, alrededor de 16 horas diarias. Este patrón de crecimiento hace que las plantas tarden más en completar la floración, hasta erupcionar en multitud de cogollos de sativa largos y poco compactos.

3. Olor y sabor

Las variedades sativa son conocidas por ser muy picantes, gracias a sus distintos perfiles de terpenos, que producen aromas que pueden variar desde cítricos y dulces hasta terrosos o especiados.

Las sativas tienden a contener una mayor concentración de terpenos como el pineno y el limoneno, que pueden crear una experiencia eufórica y estimulante. También tienen una baja concentración de terpenos como el mirceno, que se encuentra con frecuencia en las cepas indica y se considera que tiene efectos sedantes. Aunque hay excepciones a la regla, y diferentes fenotipos de la misma variedad pueden producir diferentes concentraciones de terpenos, la distinción en la mezcla de estos terpenos puede ayuda a arrojar luz sobre las diferencias entre sativas e indicas.

4. Cannabinoides

De la misma manera, los perfiles de cannabinoides pueden variar significativamente según la planta. Pero en comparación con las cepas índicas, las sativas generalmente contienen una concentración más alta de tetrahidrocannabinol (THC) y más baja de cannabidiol (CBD). También son naturalmente más abundantes en tetrahidrocannabivarina (THCV).

En el caso de las sativas, la incidencia del sol puede ser una de las causantes de una mayor presencia de THC, que actuaría como una pantalla protectora que mantiene a salvo a la planta de las excesivas radiaciones ultravioletas. De este modo, aquellas plantas que provienen de zonas más soleadas son más potentes y con efectos mucho más complejos.

Efectos del cannabis sativa

Los perfiles de cannabinoides de la marihuana sativa son conocidos por provocar efectos mentales estimulantes que ayudan a los usuarios a sentirse concentrados y motivados. La respuesta eufórica producida por los efectos de la marihuana sativa a menudo se describe como "cerebral", y también se dice que fomenta la conversación profunda y mejora la creatividad, por lo que es más adecuada para el uso diurno o las situaciones sociales y para los esfuerzos artísticos.

Por tanto, las sativas se caracterizan por producir un efecto eufórico y se suelen usar para pacientes que padecen enfermedades mentales y trastornos del estado de ánimo, como ansiedad, depresión o trastorno por déficit de atención (TDAH). También pueden ser beneficiosas para tratar problemas con el apetito y ayudar a reducir la grasa del cuerpo en trastornos relacionados con la obesidad.

Variedades populares sativa

Si bien existen varios tipos de sativa y de semillas de variedades con dominancia sativa disponibles en el catálogo de Dinafem, aquí van cinco de las que tienen más aceptación: