- El autocultivo de marihuana no es siempre un camino fácil, existen múltiples plagas y enfermedades que pueden atacar a tus plantas de cannabis y utilizar productos que no sean de origen biológico, no es lo más recomendable.
- Existen varios remedios orgánicos que pueden ayudarte eficazmente a combatir las peligros que amenazan a tu cultivo y el aceite de neem es uno de ellos. En realidad, es uno de los productos estrella, tanto por su efectividad como por sus diferentes usos. En este post te explicamos todo lo que debes saber sobre el aceite de neem y sus aplicaciones. ¡Sigue leyendo!
¿Qué es el aceite de neem?
El aceite de neem es un pesticida de origen biológico que se extrae de las semillas del árbol del neem, también llamado nim, margosa o lila india. El árbol de neem (Azadirachta indica) pertenece a la familia Meliaceae, y su origen se encuentra en la India y en Birmania. El uso de este árbol se remonta a 4.500 años atrás, pues excavaciones arqueológicas en el noroeste de la India han revelado que ya por aquel entonces se fabricaban algunos preparados terapéuticos con las hojas del árbol de neem. A parte de su uso como insecticida, el aceite de neem se ha utilizado tradicionalmente para otros fines, siendo un ingrediente muy común tanto en preparados cosméticos como medicinales.
Debido a sus interesantes propiedades, este árbol fue introducido en otros países de Asia, América África y Australia, pues se puede cultivar perfectamente en zonas tropicales y subtropicales siempre y cuando el terreno no esté a una altitud demasiado elevada.
El aceite de neem se puede extraer de diferentes partes del árbol, pero normalmente se utilizan las semillas, ya que estas contienen el porcentaje más elevado de azadiractina, el componente que actúa como insecticida y antifúngico.
Usos del aceite de neem en el cultivo de marihuana
El aceite de neem contiene múltiples principios activos (entre ellos la azadiractina), que resultan muy eficaces para combatir las plagas y enfermedades que pueden afectar a las plantas de la marihuana:
- El aceite de neem como insecticida: la azadiractina tiene la capacidad de provocar que determinadas especies de insectos dejen de alimentarse y también impide la maduración de las larvas. En algunos casos, el aceite de neem también obstruye las vías respiratorias de algunos insectos y los conduce a la muerte. Se ha comprobado que el aceite de neem es un poderoso insecticida que no solamente actúa como preventivo, también es efectivo para combatir determinados insectos una vez estos ya se han instalado en el cultivo. El aceite de neem es un buen aliado para el control de plagas como la mosca blanca, el pulgón, la cochinilla y la araña roja, entre otros. Sin embargo, hay que destacar que el aceite de neem debería utilizarse únicamente durante el periodo vegetativo, pues no es aconsejable rociarlo sobre las flores de cannabis.
- El aceite de neem como antifúngico: el aceite de neem es también efectivo como tratamiento antifúngico, pues ayuda a evitar la aparición de hongos que pueden atacar a la planta de la marihuana como por ejemplo el mildiu, el oídio o la botrytis.
El aceite de neem, además, no afecta a ciertos insectos beneficiosos como las crisopas o las mariquitas, especies que pueden contribuir a mantener tu cultivo de marihuana sano.
¿Cómo aplicar el aceite de neem a tus plantas de marihuana?
Existen varias formas de tratar tus plantas de cannabis con aceite de neem, las más comunes son:
- Pulverización: es uno de los modos más comunes de utilizar el aceite de neem. Se trata de pulverizar la planta con una mezcla de aceite de neem y agua. No es una buena idea aplicar el aceite de neem durante las horas más fuertes de sol, pues las hojas podrían quemarse, es preferible aplicarlo en horario nocturno. Tampoco debe utilizarse este método con temperaturas extremas (demasiado elevadas o muy bajas).
- Tratamiento sistémico: el aceite de neem también puede aplicarse como tratamiento sistémico añadiendo este producto al agua que se utiliza para el riego.
- En polvo: la llamada "harina de neem" se utiliza sobretodo para pulverizar la superficie del sustrato. De este modo se evita la puesta de huevos de algunos insectos como la mosca del sustrato, a la vez que se impide que las posibles larvas que se hayan desarrollado en él emerjan a la superficie. Es por tanto un método eficaz para cortar el ciclo vital del insecto y eliminarlo.
ADVERTENCIA: El aceite de neem tiene un sabor amargo, por tanto se desaconseja su uso en la planta de la marihuana durante el periodo de floración.
El aceite de neem y el medio ambiente
El aceite de neem resulta un buen aliado para el medio ambiente pues la azadiractina se descompone rápidamente. La vida media de este compuesto en el sustrato es de 3 a 44 días después de su aplicación, en el agua de 4 minutos a 4 días y desaparece de las hojas dos días después de la pulverización. Los demás principios activos del aceite de neem se descomponen a través de los microbios que hay en la mayoría de los ambientes del suelo y del agua. Es por ello que el aceite de neem resulta una buenísima herramienta a la hora de combatir plagas y enfermedades, pues además de ser muy eficaz, no daña el ecosistema, ya que no tiene prácticamente ningún efecto adverso para la salud de los pájaros, mamíferos, y algunos insectos. Sin embargo, hay que destacar que la azadiractina sí que resulta moderadamente tóxica para los peces y otros animales acuáticos.
Toxicidad del aceite de neem en humanos
Aunque el aceite de neem no es tóxico para la mayoría de mamíferos, hay estudios que señalan que una exposición prolongada de este producto en niños podría causar daños en el hígado. Además, se ha comprobado que el aceite de neem podría tener un efecto abortivo en humanos ya que podría impedir la implantación del embrión.
Sabías que…
La mitología India relata cómo el árbol de neem se convirtió en un árbol sagrado bendecido con el don de curar todas las enfermedades. La historia más popular cuenta como Indra, el rey del cielo, bajó de este con una olla de oro llena de ambrosía (el alimento de los dioses), que había robado a los demonios. Según el mito, sin querer Indra derramó un poco de ambrosía sobre el árbol de neem, dotándolo así de propiedades milagrosas para curar durante toda la eternidad.
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