- En bebidas alcohólicas, cápsulas de café, pastillas, parches o incluso como polvo de marihuana, estas son las últimas apuestas de la industria cannábica para aprovechar los efectos de la planta en sus muchas modalidades.
- Todos estos nuevos productos atienden a la demanda de una sociedad cada vez más interesada en el cannabis y sus aplicaciones tanto lúdicas como medicinales.
Desde principios de 2018 toda la costa oeste de Estados Unidos goza de vía libre para consumir marihuana recreativa, a la vez que la mitad del país ya tiene acceso al cannabis terapéutico. A esto se une que Canadá, donde también es legal su uso medicinal, ya ha fijado una fecha, junio de 2018, para dar luz verde a su consumo lúdico. Todo ello ha acelerado en Norteamérica una industria que no solo se ha fijado en su cultivo, sino también en nuevos formatos para su comercialización.
Este 'boom' ha llevado incluso a reconciliar dos sectores enemistados históricamente. Ahora el alcohol y el cannabis se dan la mano para desarrollar cervezas, bebidas energéticas y hasta cócteles con las propiedades de la planta. Aunque no solo eso, las nuevas propuestas también pasan por ofrecer preparados de marihuana en cápsulas de café.
Además, más allá de las cremas y los aceites ricos en CBD, las compañías cannábicas enfocadas en sus beneficios medicinales y terapéuticos también apuestan por nuevos formatos como las pastillas o los parches transdérmicos. Incluso ha surgido quien propone vender polvo de marihuana, ya sea a proveedores que lo utilicen para comestibles o directamente a los consumidores para tomarlo mezclado con agua.
Así ha entrado en juego la creatividad de nuevos emprendedores que han visto en el cannabis la gallina de los huevos de oro. Tampoco han dejado pasar su oportunidad muchos inversores que encuentran en la planta un buen filón por el que apostar. Con este panorama y el creciente interés del público las expectativas ante los nuevos formatos no pintan nada mal. Ahora bien, ¿cuáles son los que están teniendo más éxito?
Cervezas cannábicas y demás bebidas alcohólicas
La industria del alcohol, eterna enemiga del cannabis, ha acabado por rendirse a sus pies. "Si no puedes con el enemigo, únete a él" es lo que han debido de pensar al comenzar a hacer cada vez más bebidas alcohólicas con cannabis como reclamo comercial.
Las cervezas fueron las primeras en subirse al carro de la marihuana. Por ejemplo, en España contamos con la artesanal Cannabeer (a base de cáñamo) y en otros países triunfan la suiza HanfBlüte, la checa Euphoria Cannabis Beer, la alemana Cannabis Club Beer o la holandesa Haze Cannabis Beer, entre otras.
Pero ahora ya se ha empezado a pensar en otras bebidas alcohólicas. Constellation Brands, famosa por sus marcas de cerveza Corona y Modelo, y que también cuentan con vinos y licores, ha firmado una colaboración con la multinacional cannábica Canopy Growth para crear una nueva línea de bebidas alcohólicas con cannabis. La medida se produce en base a distintos análisis de datos que abarcan 80 años de alcohol y 35 años de incidencia del cannabis en los EE. UU.; y que sugieren que, aproximadamente, el 80% de los consumidores reducen la ingesta de alcohol cuando introducen el cannabis en sus hábitos.
Aunque Constellation Brands ha asegurado que no tiene intención de vender estos productos en Estados Unidos hasta que el cannabis no sea legal a nivel nacional, sí lo hará en Canadá este mismo año. Este país legalizará la marihuana recreativa en verano, aunque su implantación será gradual y probablemente los productos comestibles y bebibles no se podrán comercializar hasta 2019.
Mientras, tanto en Norteamérica como en otros lugares del mundo, ya existen refrescos de cannabis que no contienen alcohol. Por ejemplo, en Colorado (Estados Unidos), donde la marihuana recreativa es legal desde enero de 2014, triunfan los elixires Dixie. Estas bebidas con sabor a sandía, melocotón, limón cuentan con unos 90 miligramos de THC por botella. Además el fabricante advierte que su efecto dependerá de la persona y las circunstancias. No será lo mismo tomarlo mientras se come o con el estómago vacío.
Otra bebida que destaca es la Cannabis Energy Drink elaborada con extracto de semilla de cáñamo pero sin THC. Esta hecha a base de cafeína, taurina, azúcares y la esencia del cáñamo, y también se puede consumir en Europa.
Cápsulas de café y marihuana
Ante la inminente legalización recreativa en Canadá, otro mercado que ha visto posibilidades en la marihuana han sido el de las compañías cafeteras. Recientemente Club Coffee, con sede en Toronto desde 1906, se asoció con CannaTrust, que cuenta con la licencia médica en territorio canadiense desde mediados de 2014. Fruto de la unión ha surgido la firma Cannabis Coffee & Tea Pod Company Ltd que desarrollarán unas cápsulas de café y preparado de cannabis.
Así nace la marca BrewBudz, que también cuenta con té y chocolates cannábicos en monodosis para utilizar en las máquinas al estilo de Nespresso y Tassimo. Sus creadores lo lanzarán primero en Estados Unidos para ver la acogida de un público más habituado a los productos de este tipo.
No obstante, no son los primeros en innovar con este nuevo formato. La compañía Jane´s Brew ya ofrece cápsulas cannábicas por 10 dólares (unos 8,5 euros, al cambio actual). Cada una de ellas contienen 10 mg de THC y su acción es rápida y de larga duración, aunque sin sabor ni olor a cannabis. Su éxito ha sido tal, que ya ha sido premiada en la HempCon en la categoría a mejor comestible.
Pastillas y parches de marihuana medicinal
Acostumbrados a las cremas y los aceites, la industria de la marihuana medicinal también busca reinventarse lanzando nuevos formatos. Por eso comienzan a apostar por un concepto más relacionado con la medicina como son las pastillas o los parches transdérmicos (conocidos por su uso para dejar de fumar tabaco).
O, por lo menos, así lo ve el canadiense Richard Goldstein, cofundador de Canntab Therapeutics, quien recientemente confesó que uno de los retos de su compañía es llevar ciertos avances médicos al cannabis terapéutico. Su compañía acaba de firmar un acuerdo con el productor canadiense Emblem para fabricar este tipo de comprimidos.
Goldstein cree que la comunidad médica estará contenta con sus propuestas ya que sus productos permiten ajustar claramente las dosis como ocurre con otros tratamientos en pastillas. "Nuestras píldoras son de liberación prolongada, por lo que duran de 12 a 18 horas y están hechas para el tratamiento del dolor", señaló Goldstein. Estos emprendedores cannábicos también han pensado en crear parches de marihuana para tratar enfermedades musculares o combatir la adicción al tabaco. Estos parches liberan paulatinamente una dosis relativamente alta de cannabinoides y se aplican en zonas donde confluyen muchas venas, como las muñecas. Según los testimonios de quienes han comenzado a probarlos, los efectos son drásticamente distintos a otras formas de consumir cannabis. Y es que cuando se fuma, el cannabis revela sus efectos en unos pocos minutos, mientras que con estos parches son necesarias muchas horas, pues los efectos son más duraderos, además de no ser alucinógenos.
Los perfiles de terpenos
La ciencia también está descubriendo que los terpenos son mucho más significativos de los que creíamos, al actuar de forma directa con el efecto que producen los cannabinoides gracias al llamado 'efecto séquito'. Esto quiere decir que el THC o el CBD sin ellos no provocan los mismos beneficios.
Todo esto ha provocado un 'boom' en torno a los terpenos y, en los últimos años, la industria cannábica ha puesto mucho esfuerzo para sacar productos relacionados con estos compuestos aromáticos. Así han llegado los perfiles de terpenos, una especie de concentrados 100% naturales que reproducen el aroma y el sabor de distintas variedades de cannabis. Para ello se analiza en el laboratorio una extracción de terpenos de cannabis, y se reconstruye con los mismos terpenos pero extrayendo estos de otras plantas legales.
Varias marcas se han posicionado al frente de esta revolución de los terpenos, entre las que se encuentran Cali Terpenes o Pure Sativa. Ambas han sacado a la venta distintas reproducciones cuasi exactas de perfiles de terpenos de variedades tan exóticas como la Tropicana Cookies, Blackberry Kush o 707 Truthband. Estos productos están destinados a personas que quieran disfrutar del aroma del cannabis sin los efectos psicoactivos propios de la planta. Se pueden aplicar en los cigarrillos, diluirlos para un vaporizador o añadirse en cremas, lociones y aceites de masaje. Incluso hay quién lo añade al propio cannabis para corregir algún cogollo que hayan perdido su esencia por el camino.
¿Qué es el polvo cannábico?
Sin duda, una de las grandes novedades de estos nuevos formatos es el polvo de marihuana. Desarrollado en conjunto por el cultivador THC Design y la empresa de biotecnología Made by Science, está formado por más del 80% de THC y puede disolverse fácilmente en agua o espolvorearse sobre otros productos. Si bien ya existen polvos con concentrados de cannabis (y mucha cantidad de almidón) en lugares como Colorado y Washington, sus fabricantes aseguran que es un producto totalmente diferente. Ellos la definen como una de las primeras mezclas de extracto de cannabis soluble en agua y fácil de usar del mundo.
Además, como aseguró Ryan Jennemann, cofundador de THC Design, su intención es comercializarlo a fabricantes de comestibles que en estos momentos utilizan aceite de THC para producir brownies, galletas o gominolas de cannabis. Estos aceites no garantizan que el THC se distribuya de manera uniforme por el producto mientras que este polvo microencapsulado y de "secreta fabricación" sí lo hace, consiguiendo que cada porción tenga la misma dosis. Además, según sus creadores, este polvo se puede utilizar como un ingrediente de cocina normal. "Es como agregar azúcar o harina", asegura Joshua Held, CEO de Made by Science. "Incluso puedes espolvorear sobre la comida".
Por ello también han planeado en venderlo directamente a los consumidores en los dispensarios de Los Ángeles. Los pacientes pueden mezclar el polvo de marihuana en un vaso de agua y tomarlo de un trago. Y ahí no acaba todo, puesto que sus fabricantes están trabajando en una versión que pueda utilizarse de bebida para paliar los efectos de la resaca, como harías al tomar fármacos como el espidifen.
En definitiva, todos son nuevos formatos de consumo que ya están en el mercado o se les espera a muy corto plazo; y con los que podemos disfrutar un poco más de la planta de cannabis y todos sus beneficios. ¿Te atreverías a probarlos?
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