- En caso de que sea aprobada permitirá el cultivo de la planta con fines terapéuticos y de investigación, y muchos enfermos podrán beneficiarse de su consumo sin tener que pedir los medicamentos al exterior. Además, la decisión será vinculante para todas las partes del país. El apoyo de numerosos políticos, ciudadanos, profesionales y miembros de la industria ayudará a que la medida se haga real muy pronto.
El pasado 22 de febrero el Ministerio de Salud australiano, de la mano de la ministra Sussan Ley, presentó en el Parlamento Federal un proyecto de ley con el objetivo de que se permita el cultivo de marihuana y de que numerosos pacientes puedan acceder a fármacos cannábicos con aprobación de un facultativo. Lo más importante de todo es que, de aprobarse la ley, tendría vigencia a nivel nacional, por lo que los estados no podrían de forma independiente dictar ninguna norma contraria y deberían acatar la decisión sin oponerse.
El proyecto propone crear un sistema de licencias para cultivar y fabricar los medicamentos de marihuana, para lo que deben seguirse algunas directrices. Entre ellas, se creará un mecanismo para pedir y conseguir la licencia que permita el cultivo y obtener los fármacos. Además, también se necesitará autorización para investigar sobre plantas de cannabis con uso medicinal.
Por otro lado, quienes obtengan el permiso de cultivo deberán demostrar que tienen acuerdos con fabricantes de medicamentos autorizados. Asimismo, quienes gestionen la concesión de licencias también se encargarán de controlar la cantidad de marihuana que se produce y de garantizar la seguridad del producto final.
Esta legislación pretende asegurar que existe una cadena de suministro legítima entre quien cultiva, quien produce y quien recibe la marihuana. Además, la enmienda prevé sancionar de forma severa a quienes infrinjan estas condiciones o realicen actividades no autorizadas.
Hasta el momento, algunos pacientes tienen permiso para medicarse con esta planta, pero se ven obligados a utilizar productos importados de otros países, lo que hace que muchas veces existan problemas de aduana. La nueva legislación superaría estos inconvenientes y contribuiría a generar un sistema nacional con el que el resultado final sería recetado por un profesional médico.
Ley explicó que muchas personas han trabajado duro para que una decisión como esta se tome. La medida, que supone una enmienda a la legislación sobre estupefacientes, "ofrece la pieza que falta en el viaje del paciente cuando se trata de acceder a cannabis medicinal seguro, confiable y legal". La ministra cree que este es un momento del que muchos se sienten orgullosos, especialmente quienes han defendido esta decisión con firmeza y quienes la han llevado hacia adelante con determinación. De hecho, el gran apoyo que suscita esta propuesta por parte de médicos, pacientes, miembros de la industria y hasta políticos, hará que su paso por las dos cámaras del Parlamento sea, muy posiblemente, satisfactorio.
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