Tras la sentencia del Tribunal Supremo, la izquierda en México pide importar semillas

Hace algunas semanas el Senado mexicano aprobaba abrir un debate que aborde la posible legalización de la marihuana en el país. La idea viene después de que una sentencia del Tribunal Supremo amparara a varios miembros de la sociedad SMART, que ahora podrán cultivar, cosechar, poseer y transportar marihuana para autoconsumo.

A raíz de esta resolución, otros han decidido lanzar sus propias peticiones. En menos de un mes 55 personas han pedido autorización para conseguir lo mismo que los miembros de aquella asociación. A ellas se ha unido el Partido de la Revolución Democrática. La agrupación de izquierdas lo ha hecho con un toque diferente, pues ha presentado 32 solicitudes no solo para consumir y sembrar sino también para importar semillas de la hierba desde los lugares en los que la venta sea legal.

El titular del área juvenil del PRD, Sergio Leyva, acudió ante Cofepris para presentar una solicitud por parte del Distrito Federal, mientras que otros 31 miembros del partido lo hicieron en nombre de cada estado del país. Se trata de un salto cualitativo en la solicitud, puesto que incluye al principio de la cadena la comercialización de esas semillas, tal y como ha explicado el diputado Abraham Rojas, quien recientemente propuso la legalización de la hierba para el ámbito terapéutico.

Es una cuestión importante ya que, con la sentencia de la alta institución, es Cofepris (la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios) la encargada de otorgar los permisos. Sin embargo, esta entidad no está obligada a entregar semillas a quienes los obtengan.

De hecho, uno de los jueces que debatieron la resolución se posicionó en contra de ella al considerar que adquirir semillas para sembrar es delito en el país, por lo que será difícil garantizar que el resto del proceso (cultivo y consumo) tenga lugar sin obstáculos. Parece claro que mientras la parte inicial del proceso siga estando prevista como delito se hará difícil obtener esas semillas de forma regulada.

No obstante, si este partido de izquierdas logra una respuesta positiva, la situación cambiará. Muy posiblemente adquirir el producto estará aceptado y quienes vayan a consumirlo y cultivarlo no tendrán ningún tipo de problema legal. De momento es necesario esperar la contestación que recibe.