- La inteligencia artificial está revolucionando la forma en que se cultiva, procesa y comercializa el cannabis, presentando interesantes oportunidades para el futuro del sector.
- Con sistemas impulsados por IA, los productores pueden optimizar el cultivo de plantas analizando factores como la temperatura, la humedad y las condiciones de iluminación, permitiendo una mejora de la productividad general.
- Además, los algoritmos de IA se pueden utilizar para analizar las preferencias de los usuarios y predecir las tendencias del mercado, ayudando a las empresas a tomar mejores decisiones y optimizar sus estrategias de marketing.
Cada vez más, estamos integrando la inteligencia artificial en nuevas formas de realizar trabajos, utilizando los datos como un poderoso impulsor para optimizar los recursos de manera más efectiva. Y cuando se trata de cannabis, la inteligencia artificial está aportando estos mismos beneficios de formas nuevas e interesantes. La IA está transformando nuestra vida diaria. ¿Por qué la marihuana debería ser una excepción?
La tendencia de integrar la IA en el mercado de producción y consumo de cannabis está en su etapa incipiente, pero nos acercamos rápidamente a un momento en el que la inteligencia artificial se incorporará por completo a una amplia variedad de funciones relacionadas con la marihuana, desde el cultivo hasta el almacenamiento, desde la semilla hasta venta. Veamos cómo.
El cultivo de cannabis, un campo verde para la IA
Los productores de cannabis, sobre todo en mercados legales como EE. UU. o Canadá, ya han comenzado a emplear soluciones de inteligencia artificial en sus plantaciones. Existen muchísimas variables que pueden afectar el crecimiento de una planta, desde la exposición a la luz hasta la cantidad de riego o la temperatura, entre otras.
La IA puede aprender rápidamente la configuración ideal para cientos de puntos de datos que contribuyen al crecimiento de una planta y garantizar que los dispositivos automatizados mantengan los niveles adecuados para obtener el mejor producto.
Estos sistemas pueden realizar ajustes en tiempo real para crear las condiciones ideales, lo que lleva a mejores rendimientos en la calidad de los cultivos. Además, la automatización no solo aumenta la eficiencia, sino que también reduce el riesgo de error humano, lo que resulta en una producción más consistente y confiable.
Por ejemplo, robots móviles equipados con cámaras conectadas a IA pueden recorrer los pasillos de los invernaderos de cannabis por la noche, escaneando las plantas con imágenes espectrales. La IA convierte estos escaneos en un modelo 3D de cada planta y luego combina esa imagen 3D con datos ambientales para generar un informe del progreso de la planta. Este informe actualizado periódicamente evalúa las tasas de crecimiento, los niveles de THC, los compuestos cannabinoides, la posible aparición de enfermedades, la presencia de plagas y mucho más.
La IA también está haciendo que la hidroponía del cannabis sea aún más eficiente, al cultivar plantas de cannabis en un sistema agrícola sin suelo impulsado por algoritmos. Los productores asistidos por IA pueden reducir el consumo de agua, eliminar el uso de pesticidas, aumentar el rendimiento y ocupar considerablemente menos espacio.
También los modelos de IA pueden analizar datos de ciclos de cultivos anteriores para predecir los mejores momentos de siembra, ventanas de cosecha e incluso las cepas que tienen más probabilidades de prosperar en un entorno específico. Incluso puede determinar qué variedades de cannabis se venden mejor y personalizar las condiciones de cultivo para producir constantemente la misma variedad.
IA en el desarrollo de productos y servicios cannábicos
El futuro de los productos de cannabis tiene que ver con la personalización, y la inteligencia artificial está desempeñando un papel crucial para que esto suceda. En muchos casos, la IA ya se utiliza para vender cannabis de una manera distinta. La tecnología puede identificar tendencias generales y ayudar a las empresas a tomar mejores decisiones comerciales en general. Desde comparaciones de tráfico presencial hasta ventas on-line y datos demográficos de los clientes, todo el conocimiento que recopila un minorista puede ser manejado más rápidamente por la IA para producir una información más procesable que si la recopilara una persona.
Sin embargo, cuando se trata específicamente de marihuana, la IA se utiliza cada vez más para buscar en bases de datos de investigación sobre cannabis para identificar ciertas cepas que pueden adaptarse mejor a un público objetivo que otras.
Es probable que los clientes ya hayan encontrado IA en las ventas de cannabis cuando se trata de chatbots. Algunos minoristas de cannabis en EE. UU. y Canadá tienen sitios web con texto basado en inteligencia artificial que pueden ayudar al usuario a determinar qué producto es mejor para ellos. Aún más específicamente, de la misma manera que la IA puede ayudar a una marca a determinar qué variedades se venderán, también puede ayudar a los consumidores a determinar cuáles comprar.
Así, ciertas aplicaciones o funciones del sitio web pueden tener en cuenta las preferencias de los clientes y, en función de sus aportaciones, como los rasgos particulares que buscan, dirigir al usuario a un tipo particular de cannabis. La IA puede incluso decirle instantáneamente a un cliente la ubicación más cercana donde puede encontrar ese producto.
Los mejores sistemas de aprendizaje automático mejoran con cada uso, a medida que la tecnología aprende lo que buscan las personas y los desarrolladores aplican las últimas investigaciones para mejorarlos también. Para los especialistas en marketing de cannabis, el uso de la IA es una oportunidad para decirles a los clientes exactamente qué tipo de experiencia de compra personalizada puede ofrecer una compañía de marihuana.
Investigación sobre medicamentos y nuevas genéticas
La búsqueda de nuevos tratamientos farmacológicos basados en la marihuana es una de las áreas más candentes de la biotecnología, una tendencia que también puede verse impulsada por la IA, que aprovecha el aprendizaje automático, el análisis de datos y la automatización para optimizar diversos aspectos del desarrollo de fármacos.
La IA está demostrando ser experta en identificar los numerosos cannabinoides que pueden tratar enfermedades crónicas, en particular el cáncer. Los algoritmos de aprendizaje automático pueden predecir la actividad biológica y el perfil de seguridad de estos candidatos, ahorrando mucho tiempo y recursos que se habrían gastado en experimentación de prueba y error.
Además, la IA permite a los investigadores analizar e interpretar datos biológicos complejos de forma más eficaz. Puede extraer conjuntos de datos clínicos, descubriendo patrones ocultos y posibles objetivos farmacológicos. Este enfoque basado en datos ayuda a seleccionar los fármacos más prometedores y sus dosis óptimas. De hecho, la IA está ayudando a las empresas emergentes de biotecnología de la marihuana a acelerar la etapa de pruebas clínicas, que suele ser muy larga.
A medida que avanza el año 2024, podemos esperar más innovaciones, por ejemplo, en la integración de la blockchain para proporcionar cadenas de suministro transparentes y seguras. Y sobre todo en genética y el mejoramiento impulsados por la IA para desarrollar nuevas cepas.
La mayoría de los productores de cannabis modernos ya tienen en cuenta la genética al cultivar nuevas plantas, pero los criadores ya están empezando a utilizar motores de inteligencia artificial para avanzar en el proceso. Estos motores utilizan marcadores genéticos patentados para identificar variedades de cannabis existentes que podrían cruzarse para crear descendientes aún más potentes, sobre todo orientadas para el mercado medicinal. O particularmente seleccionando terpenos nuevos y únicos que puedan ofrecer sabores y olores nunca antes vistos.
Como siempre, la IA funciona mejor cuando no se utiliza en lugar de personas, que son las que saben cómo poner los datos en acción, sino en conjunto con ellas. Se necesitará algo de trabajo por adelantado para determinar qué necesita saber y qué datos vale la pena examinar más a fondo para tomar las decisiones que beneficiarán más a un negocio concreto de cannabis. Y cuando se trata de utilizar la IA y poner esa información a trabajar, todo ese tiempo acabará mereciendo la pena.
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