La iglesia de la marihuana celebra su primera 'misa' para combatir el estigma de la planta

Lansing, capital del estado de Michigan, puede considerarse una de las pioneras en Estados Unidos en legalizar el consumo de marihuana, pues disfruta de sus beneficios desde el año 2008. A lo largo de ests ocho años, ha tenido tiempo para desarrollar un modelo de negocio sólido, al tiempo que innovaba en una industria en auge y constante cambio. No obstante, también ha podido comprobar que, a pesar de la liberación, la marihuana sigue estando cargada de estigmas negativos. Para hacer frente a ellos, la ciudad ha optado por impulsar iniciativas que derriben los estereotipos que inundan las mentes de los más escépticos.

Una de estas iniciativas ha sido la creación de la primera Iglesia Cannábica de la Razón y la Lógica. Un espacio no confesional que ya ha organizado su primera misa para combatir el estigma asociado al consumo de marihuana.

Este peculiar rito, como si de cualquier otra religión se tratara, se desarrolla el domingo a partir de la una de la tarde. Jeremy Hall, sacerdote de esta cannabica religión, es el encargado de oficiar la ceremonia. Él es además, usuario de marihuana terapéutica. De manera altruista, realiza servicios semanales para fomentar la inspiración y así animar a sus vecinos. Indica que Lansin es el lugar ideal para situar su iglesia, pues ha mostrado apoyo al cannabis medicinal y los dispensarios desde que aprobara el Acta sobre Marihuana Medicinal en el año 2008.

“Lo que intento conseguir a largo plazo es proporcionar a la gente un espacio donde puedan ser espirituales y sentirse seguros para utilizar cualquier medicación. Además, si sienten que el cannabis forma parte de su espiritualidad, pueden combinar ambas en un lugar tranquilo”, comenta el sacerdote Hall.

Sus perspectivas de futuro son positivas. Cree que la suya es tan solo la primera de otras muchas eglesias cannábicas en el estado de Michigan. La de Hall cuenta ya con su propia página de Facebook, donde se define a sí misma como un lugar donde “dejar la teología religiosa en manos del individuo”. A través de ella, intenta compartir entre los miembros de la comunidad su crecimiento moral personal y lograr un entendimiento filosófico.

Lejos de limitarse a los pacientes de marihuana medicinal, desde la Iglesia Cannábica de la Razón y la Lógica animan a todos los ciudadanos a visitar el lugar. Manteniendo una mente abierta, tendrán la oportunidad de entender los beneficios de la planta al tiempo que descubren que muchas de las apreciaciones negativas que recaen sobre su consumo carecen de fundamento en la realidad.

Esta peculiar iglesia, completamente altruista, también realizará una colecta cuyos beneficios no serán económicos ni caerán en manos de la institución. El propósito principal de esta iniciativa es animar a los asistentes a traer con ellos la marihuana que les sobre para repartirla entre los pacientes que necesitan tratamientos a los que no pueden acceder.