- ¿Buscas una variedad fácil de cultivar y rápida que garantice grandes cosechas y que resista bien el frío y la humedad? Sin ninguna duda, Amnesia XXL Autoflowering está hecha para ti.
- Si no estas convencido, echa un vistazo al grow report de nuestro colaborador Ganja Farmer en el que plasma la experiencia de MartIn, un cultivador con prisa que ha puesto en marcha su cultivo en marzo para poder cosechar los cogollos de marihuana en junio y pasar un verano tranquilo con provisiones suficientes.
La elección de la variedad
MartIn, grower del sudeste de Francia, busca una cosecha a la vez rápida y abundante. La elección ha recaído en una conocida variedad de Dinafem que ha sido mejorada en una versión que ofrece una producción mayor. Entre las cepas disponibles en el mercado, la elegida ha sido la Amnesia XXL Autoflowering porque ofrece una producción razonable para una variedad autofloreciente y porque garantiza una cosecha muy rápida. La última temporada no fue nada buena, en realidad fue catastrófica: a penas quinientos gramos. Martin hizo todo lo posible para que le duraran el mayor tiempo posible pero a mediados de abril se le acabaron las existencias. La época de festivales empieza en junio, y para un músico como él es un poco triste encontrarse con las manos vacías en ese momento. Así que esta temporada se puso manos a la obra y viajó a Ventimiglia a principio de febrero para hacerse con las preciadas semillas en la tienda Dinafem.
No hay tiempo que perder con las autoflorecientes
El tiempo era bastante bueno y decidí plantar mis diez semillas en un mini invernadero, en macetas de turba para evitar el shock de un trasplante. Las diez semillas germinaron pero una de ellas murió de forma inexplicable pasada una semana. En realidad, no había compactado bien la tierra de esa maceta, las raíces se encontraron con el vacío, con un hueco húmedo, propicio para los ataques de los hongos. Moraleja: los brotes jóvenes son extremadamente delicados, hay que tratarlos como si fuesen bebés y estar pendiente del más mínimo detalle.
Y ahora, la carrera ya está en marcha: con las autos no se puede perder un solo segundo en el periodo vegetativo. Aunque, a menudo, son las condiciones climatológicas las que provocan pérdidas de tiempo. Por debajo de 20 ºC estas jovencitas tienen frío y, aunque no mueren necesariamente, su crecimiento se ralentiza o se detiene. Mi jardín está situado por encima de la ensenada de Toulon, en la Costa Azul, la zona con más días de sol de Francia. Los turistas piensan que siempre hace buen tiempo, porque es un destino vacacional, pero hasta finales de abril podemos tener verdaderos diluvios que pueden hacer que las jóvenes plantas acaben en el mar. También nos podemos encontrar con olas de calor en las que el sol es abrasador y mata todo lo que se haya sembrado recientemente. No obstante, el enemigo número uno del cannabicultor de la Provenza es el mistral que se presenta con demasiada frecuencia durante la temporada de cultivo. Se trata de una fuerte corriente de aire glaciar que viene del norte, que llega a alcanzar velocidades de 90 o 100 km/h, y que puede permanecer durante diez o doce días seguidos. Durante la fase de floración, desafortunados los imprudentes que no hayan colocado tutores; corren el riesgo de ver sus esfuerzos reducidos a la nada.
Un crecimiento increíblemente rápido
Principios de marzo, transcurridas las cuatro primeras semanas de crecimiento en un pequeño invernadero, coloco las plantas directamente en la tierra. Para las autos, cavo hoyos de un metro cuadrado y fertilizo con una mezcla de sangre seca, polvo de hueso y de cuerno. El olor no es de lo mejor pero los resultados son relativamente buenos. Mi terreno es grande, lo que supone una gran ventaja porque puedo cambiar de lugar cada año. La superficie de cultivo no sobrepasa los veinte metros cuadrados y he llegado a la conclusión de que una tierra virgen, en la que nunca se ha cultivado marihuana es más fértil que un suelo sobre el que ya se han materializado uno o dos cultivos. Los growers muy optimistas que cultivan por tercer año consecutivo en el mismo lugar sin abonar de nuevo con estiércol corren el riesgo de llevarse una gran decepción. Al hacer el trasplante, me sorprende y me inquieta el hecho de constatar que dos plantas muestran ya filamentos de flores hembra a pesar de que miden apenas ocho centímetros y de que no presentan más que tres filas de pequeñas hojas.
Para las autoflorecientes, cuento cien días: cincuenta para el crecimiento y cincuenta para la floración, a veces un poco más, a veces un poco menos. Entre la cuarta y la séptima semana de crecimiento de las Amnesia XXL Autoflowering se produce un momento verdaderamente espectacular, en el cual las plantas crecen incluso durante la noche. Los filamentos de las flores hembra aparecen en la mayor parte de las plantas en la sexta semana, cuando las plantas más vigorosas alcanzan unos cincuenta centímetros. Las que empezaron a florecer en la tercera semana siguieron creciendo pero en menor proporción y ya empezaron a formar flores en la sexta semana.
El crecimiento sigue hasta la semana once, con un estiramiento satisfactorio; han duplicado su tamaño desde que se dieron las primeras señales de floración y se acercan al umbral del metro de altura. Los cogollos que se forman en la fase final son fuertes, puntiagudos y no dejan de alargarse. Su color es claro y el grado de maduración es a menudo difícil de evaluar.
Ha llegado la hora de sacar las primeras conclusiones
Decido cosechar cuando los cogollos empiezan a mostrar un color un poco grisáceo. El aroma al final del día es también el de una planta madura y las hojas amarillentas se degradan, lo que indica que el proceso de envejecimiento ha comenzado. El ambiente es seco y caluroso (35 ºC a cubierto) bajo el sol de finales de mayo. Decido cosechar cinco ejemplares y dejar que los cuatro restantes empiecen a secarse sobre el terreno durante algunos días más. Con este calor, prefiero realizar el secado en bodega. He separado una de las grandes puntas y la he puesto a secar a la sombra; se podrá consumir en menos de tres días. Los ejemplares que se han secado en bodega solo han tardado diez días en estar listos, y lógicamente estaban en unas condiciones perfectas para su degustación. He esperado un poco más para pesar la hierba porque los cogollos del extremo del tallo eran grandes pero no muy densos. Nueve ejemplares han llegado hasta la maduración; los dos que empezaron a florecer en la tercera semana solo han dado treinta gramos entre los dos. Tres plantas han dado entre sesenta y setenta gramos de cogollos; otras tres, alrededor de ochenta gramos y la más grande, aproximadamente ciento diez gramos (medía ochenta y ocho centímetros y tenía un tallo de dos centímetros y medio).
En cuanto a la calidad del producto final, recomiendo guardarlo en un tarro de mermelada, al resguardo del aire y en un lugar fresco, porque es una hierba frágil que se seca con rapidez. Recuerda a la hierba de los coffee-shops holandeses que hizo tan popular esta variedad. El sabor es muy suave, afrutado y casi azucarado, y su efecto es estimulante. Es muy buena para consumir con vaporizador o con bong, pero eso ya es cuestión de gustos. Con mis diez semillas he cosechado un poco más de un kilo. La temporada de festivales puede empezar con alegría y abundancia porque este año ya no habrá escasez.
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