Fundación Alchimia Solidaria: cuando el cannabis ayuda a quien más lo necesita

Alchimia lleva funcionando, como tienda de cultivo de marihuana, desde abril de 2001. Once años más tarde, en abril de 2012, sus responsables tuvieron la idea de crear la Fundación Alchimia Solidaria. "Para nosotros es muy importante la responsabilidad social", afirman. Es el compromiso que, como empresa, quieren tener en cuestiones sociales, medioambientales y empresariales de forma voluntaria y solidaria. Así lo explican a Dinafem su vicepresidente, Ramón Camps; su presidente, David Saulina; y su secretaria, Ida Capdevila.

La idea de la fundación surgió durante una comida con Saulina, con la finalidad de ayudar a las personas más necesitadas de la comarca de Alt Empordá, en Girona, "y aportar nuestro granito de arena en temas relacionados con el cannabis", explica Camps. A pesar de su localización en la comunidad catalana, es de carácter estatal, dado que fuera de Cataluña hay entidades que estudian las propiedades terapéuticas del cannabis y no hubieran podido llegar a ellas si su ámbito de actuación hubiera sido el autonómico.

Según su propio manifiesto, Alchimia Solidaria nace con la voluntad de provocar un cambio de valores desde el mundo empresarial y crear una nueva forma de convivir. El modo de trabajar y de ver la vida de quienes están implicados en el proyecto se basa en la familiaridad, el buen trato y el entendimiento entre compañeros y clientes. "Por eso nuestra mejor manera de empezar el día es un buen abrazo, tal como se ilustra en nuestro logo si se sabe interpretar".

Para que su filosofía se materialice, esta fundación apoya diversos eventos culturales, sociales, medioambientales y deportivos. También respalda estudios sobre cannabis medicinal, apoya al movimiento cannábico antiprohibicionista y a cualquier proyecto que persiga la normalización, así como "a iniciativas que nazcan con esta nueva manera de entender el mundo, con el máximo respeto" hacia personas y medio ambiente.

Entre ellas, desde el punto de vista social destaca su aportación a Bicicletas Sin Fronteras, una fundación que recoge y repara bicicletas en desuso para entregarlas a personas sin recursos. También contribuye con la Asociación ADONA´T, un proyecto que ayuda a las mujeres en riesgo de exclusión social; y con Cor Fi, una asociación que trabaja para la prevención de enfermedades cardiovasculares.

Desde el punto de vista medioambiental, Alchimia Solidaria colabora con el Grupo de Investigación Entomológica de Girona, centrado en la naturaleza y especialmente en los insectos, que trabaja haciendo estudios sobre la fauna de la comarca; así como con el Centro de Fauna Salvaje de los Aiguamolls de l´Empordá, especializado en la recuperación de la fauna salvaje, su rehabilitación y la liberación de ejemplares en las mejores condiciones posibles.

En el ámbito cannábico apoyan a la Fundación ICEERS, dedicada al estudio científico de la marihuana, la salud y calidad de vida de los usuarios medicinales, con el objetivo de determinar cómo puede actuar el cannabis sobre diversos pacientes y enfermedades; y a La otra realidad del cannabis, un proyecto de documental, película de ficción, álbum de música y literatura con información en castellano sobre la aplicación médica de los cannabinoides.

En su manifiesto, los impulsores de Alchimia Solidaria expresan su voluntad de mejorar el bienestar de otras personas, "en lugar de seguir el esquema habitual de ir acumulando estas ganancias". Tienen el deseo de abrir un camino innovador para obtener un provecho colectivo, para que el dinero fluya, que no se estanque, y que los proyectos que han tenido la suerte de convertirse en sus receptores tengan la capacidad de redistribuirlo entre los que más lo necesitan. Así todo el mundo sale beneficiado. 

En Alchimia Solidaria trabajan duro para que su objetivo, día a día, vaya tomando cuerpo. Según Camps, la mayoría de la gente suele reaccionar muy bien cuando descubren que esta iniciativa está relacionada con el cannabis, incluso si no son consumidores, "aunque siempre encontramos a alguien con ciertos prejuicios". A pesar de ello, están completamente convencidos de que proyectos como este son necesarios, y creen firmemente que entre todos es posible mejorar la situación de los más desfavorecidos. De esta forma "todos, probablemente, seremos más felices".