Arrancan las primeras cosechas avaladas por el Gobierno en Uruguay

Uruguay legalizó por completo la producción y venta del cannabis en 2013, una regulación que permitía que los ciudadanos pudieran cultivar marihuana por sí mismos, asistir a un club social para su disfrute o comprarla directamente en la farmacia.

Desde entonces, los cambios han sido muy lentos. Tabaré Vázquez ha relevado a José Mujica al frente del gobierno y se ha mostrado más reticente a poner en práctica algunos de los puntos que preveía la ley, como la venta de marihuana en farmacias, que el nuevo presidente ha decidido aplazar por el momento sin fecha definida.

Pero no todo son malas noticias para los amantes del cannabis en Uruguay. Ya se están cultivando las primeras cosechas de marihuana autorizadas y 2.000 agricultores domésticos se han inscrito en el Instituto de Regulación y Control del Cannabis (Ircca) para poder seguir sus pasos.

Sin embargo, mientras las primeras cosechas comienzan a dar sus frutos, los clubes de cannabis no consiguen la autorización formal. Hasta ahora, unas 17 entidades se han inscrito en el Ministerio de Educación y Cultura para conseguir el permiso, pero por el momento su autorización está en trámite: todavía tienen que esperar a que se realice una inspección al lugar.

"En esas inspecciones pueden señalar cuestiones de seguridad, por ejemplo, que nos impulsen a realizar otra inversión. Es difícil porque algo que tiene un fuerte espíritu libertario es raro vincularlo a la seguridad", ha explicado Julio Rey, fundador del club cannábico Cofradía de la Hoja Roja y miembro de la Federación Uruguaya de Cannabicultores.

Rey también apunta a que el robo de plantas de marihuana se ha convertido ya en un problema que se solucionaría con la venta de marihuana en farmacias. Un asunto que, por el momento, tendrá que esperar hasta que Tabaré Vázquez decida poner una fecha para su aprobación.