Consejos para el cultivo de guerrilla

Corren tiempos en los que, por desgracia, tras un verano de duro trabajo y dedicación, si no hemos sido lo suficientemente meticulosos con varios factores, puede que sean otros quienes recojan nuestros valiosos frutos. A continuación voy a detallar unos sencillos pasos para reducir las posibilidades de que esto ocurra. 

Evita aparcar tu vehículo siempre en el mismo lugar

Si aparcamos el coche siempre en el mismo sitio cerca del cultivo, esto puede convertirse en un señuelo. Lo ideal sería que una segunda persona nos lleve y recoja evitando dejar ningún vehículo a la vista. Si no disponemos de esa posibilidad, como mínimo te recomiendo que vayas variando tu lugar de aparcamiento. 

No dejes un rastro a seguir

El modo en el que nos movemos por el campo deja un rastro con el paso de los días de visita al cultivo, disimular este sendero es clave para poder evitar a los propagados ladrones. Lo primero que debemos hacer es procurar acercarnos por caminos ya existentes hasta el cultivo. Para salir del camino y adentrarnos en la vegetación, buscaremos a un lado un árbol bajo cuyas ramas toquen el suelo y tapen bien, lo usaremos como entrada para el recorrido al cultivo. Levantando dichas ramas accederemos detrás del árbol y a partir de ahí la clave estará en dar pasos largos, pisar siempre en el mismo sitio pie a pie y no crear un sendero marcado claro.

Cultivo de guerrilla cerca del río

En este caso vamos a tratar un tipo de cultivo en orilla de rio, pero la técnica del pie a pie nos será clave en cualquier acceso final a nuestros cultivos de guerrilla.

Tras pasar debajo del árbol y dejar el camino atrás nos dirigimos hacia el río, respetando la técnica del pie a pie. Lo ideal es encontrar una orilla de difícil acceso, que esté llena de zarzas. Un lugar con mucha vegetación que no permita el paso. Si lo encontramos, será el momento de hacer una última maniobra de seguridad: un túnel abriendo hueco por la parte baja de las zarzas.

No debería ser recto si no con un par de curvas al menos para evitar que alguien mire a través de él y vea al fondo nuestras plantas de cannabis. Para mantener dicho túnel, se pueden colocar palos de lado a lado en vertical y un travesaño que haga de viga en horizontal. 

Al principio es mejor no poner dichos apoyos para que parezca natural, como un paso de animales, y cruzar a la entrada varias zarzas para disimularlo. Cuando ya hayamos encontrado ese espacio "ideal" a la orilla del río y escondido por las zarzas, abriremos el hueco para formar la huerta, siempre dejando un buen margen de "zarzas protectoras" para que no se pueda ver el cultivo desde el rio si alguien pasa en barca, por ejemplo. A partir de aquí dejaremos de poder ser vistos y podremos centrarnos en la preparación del terreno.

 

¿Cómo preparar la tierra de cultivo?

Hay muchas y muy buenas mezclas de tierra que podríamos preparar, pero como esto es un cultivo de guerrilla, intentaremos evitar transportar ni un kilo de más a nuestro cultivo. En mi opinión, lo mejor es usar fiemo viejo de oveja. Deberíamos aportar no menos de 30-40kg para 10-15m2, con esto hasta la fase de floración nos podemos olvidar de abonar.

¿Cómo instalar un sistema de riego? 

Dado que tenemos el río al lado, nos podemos fabricar un pequeño, pero muy práctico invento. Necesitaremos los siguientes materiales:

• Batería de gel de 12V +-20Ah
• Bomba de agua 12V Comet ocean-plus 25 L/min 2,0 Bar
• Tubo diámetro 10mm interior
• Malla metálica fina (esto nos servirá para cubrir la parte baja de la bomba a modo de filtro)

Cuando tengamos la bomba con la malla instalada y el tubo conectado, la sumergiremos a unos metros de la orilla y la ataremos a alguna rama fuerte que nos venga a mano. Después, la clave está en pasar el tubo hasta nuestro cultivo de cannabis sin que este se vea.

Bastará con que cada día nos llevemos la batería a casa para cargarla y listo. ¡Este invento mueve unos 1000L a unos 2-3m de altura!

La discreción, la clave del cultivo de guerrilla

Procuraremos mimar ese parapeto que hace que nuestra huerta no sea vista desde el río, pues esto y el buen hacer en el ir y venir serán los factores que determinen el éxito de nuestro cultivo. Es importante mantener la altura de las plantas por debajo de la del parapeto.

Cuidados recomendados en fase de floración

Cuando se aproxime el mes de agosto, rociaremos bien por ambas caras las hojas con cobre o azufre autorizados en la producción ecológica para así bajar el pH de las hojas a 4, y conseguir que los hongos no las puedan poblar. Esto nos dará más garantías de que en octubre podremos cosechar los frutos de tanto esfuerzo. Cuando comienza la etapa de floración, en mi opinión solamente hará falta que aportemos un extra de abono con un fertilizante líquido ecológico, solo con esto y el suelo bien abonado previamente como hemos comentado antes, obtendremos una hierba limpia de sabor y de gran calidad.

En las partes de fuera de los meandros es donde se sedimentan los limos y alimentos que va arrastrando el río, por eso es una tierra muy muy fértil y no necesita de grandes aportes para obtener excelentes resultados, en próximos artículos iremos viendo distintos casos en los que sí será necesario un mayor aporte de alimentos y mejora de suelo.

Deseando os sea de ayuda, Sendabelarra.