- La industria de la marihuana no deja de reinventarse y sacar al mercado nuevos productos bajo la nueva ola de legalización en Estados Unidos.
- La oferta de bebidas cannábicas ha crecido y ya no solo ofrecen aromas o sabores de marihuana basados en los terpenos, sino todo tipo de propiedades centradas en los cannabinoides.
- Hoy los usuarios pueden disfrutar de la virtudes terapéuticas del CBD con agua, cerveza y vino; o, si es para fines recreativos, incluso con refrescos infusionados con THC.
A lo largo de la historia, la marihuana medicinal ha tenido diversos usos y preparaciones; la infusión ha sido una de las más tradicionales y saludables. El té de cannabis ha supuesto siempre una alternativa a fumar más suave y sana, se ha utilizado como remedio casero para combatir las náuseas y el estrés relacionado con el embarazo en países tan distantes como Jamaica o la India.
Los efectos del cannabis tardan más en llegar y generalmente son más suaves cuando se toma en té. Algunos compuestos del cannabis como el THC o el CBD son casi insolubles en el agua, pero gracias a la tecnología eso está cambiando y algunas empresas están produciendo bebidas con cannabinoides infusionados, es decir, introducidos en un líquido con el fin de que desprendan su sabor, aroma, color y propiedades y estos se mezclen perfectamente. Por ello, se abre todo un campo de posibilidades hasta el momento inédito, como el agua con CBD.
Agua con cannabis para deportistas
En Estados Unidos ya se pueden encontrar algunas marcas que ofrecen una combinación de agua pura con CBD, el cannabinoide que más uso está teniendo actualmente en medicina y terapias contra el dolor. Se trata de una bebida hidratante con muchos beneficios que ayuda a relajar el cuerpo y a aliviar las molestias musculares.
Las propiedades antinflamatorias del CBD están siendo investigadas en el mundo del deporte, donde tantas lesiones se producen. Al retirar del cannabis el THC, puede contribuir a aliviar los espasmos musculares, a conciliar el sueño por las noches y a reducir las náuseas.
Para infusionar el cannabinoide en el agua, empresas como CBD Living Water han tenido que reducir el CBD en partículas diminutas, en una millonésima de su tamaño real. En esa medida las moléculas nanométricas del cannabidiol se encapsulan en los grupos moleculares de agua. Este tamaño también permite que el cuerpo las absorba con rapidez y por lo tanto note de forma más eficaz los efectos terapéuticos del cannabinoide.
Bebidas energéticas con CBD para aliviar un mal viaje de cannabis
Cuando consumimos marihuana, el CBD actúa como antagonista y ayuda a suavizar y neutralizar alguno de los efectos del THC. De esta forma, algunas empresas han visto en las bebidas con cannabidiol un buen cortafuegos de los efectos psicoactivos cuando estos sean desagradables para el consumidor de marihuana, sobre todo para los que lo prueban por primera vez.
Por ello, American Company ha comenzado a comercializar una bebida energética llamada Cannarelief que contiene minerales, vitaminas y una concentración alta de CBD. Un brebaje para ayudar a reducir y calmar efectos molestos por un consumo excesivo de cannabis, como mareos, desequilibrio, pérdida del sentido del tiempo o náuseas. Y afirman que funciona.
Cerveza y cannabis, primos en esencia
El lúpulo, ingrediente con el que se elabora la cerveza, y el cannabis pertenecen a la misma familia de los 'Cannabaceae'. Las semejanzas entre ambas plantas son asombrosas y van desde los terpenos (compuestos naturales que proporcionan el gusto y olor de la flor) hasta los métodos de cosecha, puesto que de ambas se utilizan las flores hembras para el consumo humano. La fusión de la cerveza y el cannabis, por lo tanto, parece una de las alianzas más naturales, aunque no tanto como uno piensa.
No es recomendable utilizar el cannabis como sustituto del lúpulo, pero sí se pueden mezclar ambos o servir de ingrediente aromático en una cerveza. Existen algunas cervezas de marihuana en el mercado, solo que en el proceso de infusión del cannabis han perdido el THC. Lo normal es encontrar birras aromatizadas con terpenos y cáñamo, como el caso de la española Cannabeer, o en su defecto con algo de contenido de CBD, como la estadounidense Dude's Brews.
Limonadas, tónicas y refrescos con THC
Como podemos observar, la industria cannábica en Estados Unidos está pujando fuerte por productos con CBD, sobre todo porque en la mayoría de estados donde la marihuana es legal existen restricciones con los compuestos psicoactivos que afectan a los productos con fines terapéuticos. Pero en estados como Washington o Colorado la marihuana es legal en su totalidad, también para usos recreativos, lo que significa que también existe una gama de artículos para el entretenimiento con base en el cannabis más potente.
Por ejemplo, los usuarios disponen en el mercado de bebidas recreativas como la tónica Legal, que contiene unos 20 mg de THC. Y algunas más subidas como el refresco de CannaPunch OMG Bold, que contiene 151 mg, o la marca de limonada Cannabis Quencher, con 200 mg.
Son alternativas de ocio en un país monopolizado por el alcohol. Además, para muchos usuarios cannábicos supone un gran avance en su calidad de vida, ya que pueden salir a tomar algo a un bar y pedir una tónica de cannabis en lugar de una cerveza. No depender del rito de fumar para consumir THC ayuda en comodidad y es menos agresivo para los pulmones.
Café de marihuana Sativa
Otro rito muy popular entre los consumidores de marihuana es el de café y cigarrillo, un equilibrio de cafeína y cannabinoides frecuente en las calle de Amsterdam, donde el cannabis se consume precisamente en 'coffee shops'. Una compañía norteamericana ha decidido recoger el guante de esta costumbre y sacar al mercado el café Catapulta, una manera distinta de empezar el día.
Para elaborar este café la empresa infusiona los granos con aceite extraídos de la plantas de marihuana Sativa. Los efectos psicotrópicos tardan en llegar entre 45 minutos y una hora y media, ya que cada taza contiene unos 10 mg de THC. Esta es la dosis permitida en estados como Washington y puede que se trate de una dosis pequeña para los usuarios con mayor tolerancia, así que puede que necesiten un par de tazas para notar los efectos.
Vino con uva y cáñamo catalán
Más cerca, en Europa, la empresa española Cannawine ofrece una combinación de vino con CBD, que en España es legal y que busca fusionar uno de los mejores caldos de nuestra tierra con las propiedades medicinales del cannabis. El fundador, Josep María Funtané, consiguió superar dos cánceres a través de tratamientos con CBD y por ello decidió crear estos productos que no solo tienen un fin recreativo, sino de alivio de dolores.
Se trata del primer vino español aromatizado con extracto de cáñamo enriquecido con CBD, elaborado con uvas de la Costa Brava y con cáñamo del Delta del Ebro. Estas botellas, que pueden ser de vino tinto o blanco, contienen 50 mg del cannabinoide no psicoactivo. Sin duda, Cannawine abre un camino muy interesante para un país donde históricamente se han dado muy bien tanto el cultivo de la viña como el del cáñamo.
Soluciones de cannabis en polvo
Para cerrar este recorrido por el mundo de los bebestibles con cannabinoides cabe destacar que la industria cannábica también ha sacado al mercado sobres con contenidos en polvo de CBD o THC, para preparar tus propias bebidas instantáneas en casa, como cuando eras pequeño. Empresas como Prohibition Gold o Canna POW ofrecen preparados solubles en agua con estos cannabinoides con el fin de que los clientes puedan preparar por sí mismos y de forma sencilla bebidas cannábicas de distintos sabores. Otro logro que demuestra el interés de la industria de la marihuana por seguir desarrollando nuevos productos e investigando cómo fusionar los cannabinoides con otros ingredientes de uso común.
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