Tras 16 años, Alemania da luz verde por primera vez al cultivo de cannabis medicinal

Michael F. es un hombre de 52 años que padece esclerosis múltiple desde el año 1985. Esta enfermedad degenerativa le provoca intensas dolencias que solo la marihuana medicinal es capaz de aliviar. Debido a ello, en el año 2000 solicitó a las autoridades cultivar de manera legal el cannabis terapéutico que forma parte de su autotratamiento. 

Siendo las flores de marihuana ilegales, su solicitud se enfrentaba a numerosos rechazos, trabas y denegaciones. En un primer momento se le incautó la cosecha, pero más tarde Michael se convertiría en la primera persona en Alemania que resultaba absuelta por el cultivo de marihuana; además, se le devolvió la sustancia confiscada. Aunque suponía un claro avance, las demandas del paciente seguían sin ser completamente escuchadas por la administración alemana. 

Negativa tras negativa, Michael decidió elevar su demanda al Estado alemán. Si bien ganó los dos primeros casos en el año 2011 y 2014, las continuas apelaciones del Ministerio de Sanidad se mantuvieron firmes poniendo freno a su solicitud. 

Tras 16 años de procesos legales, finalmente su demanda ha prosperado, al llegar ante el Tribunal Federal Administrativo de Leipzig, el último al que pueden acceder los procesos en el país. Este decidió ordenar al Estado que se conceda a Michael la posibilidad de cultivar en su casa. Los jueces encargados del caso indicaron al Instituto Federal de Medicamentos y Dispositivos Médicos (BfArM) que debían permitirle ejercer el derecho obtenido. 

Aun tratándose de un caso personal, la decisión marca un precedente legal que no tardaría en acarrear consecuencias. Tras el anuncio del Alto Tribunal, el Ministerio de Salud alemán ha anunciado a través de un comunicado de prensa que tomaría las medidas oportunas para legalizar la marihuana medicinal en el próximo año. 

Las reacciones ante la noticia tampoco han tardado en aparecer. Por ejemplo, la Asociación Alemana para los Medicamentos con Cannabinoides ya ha recomendado a los pacientes con permiso en el país (se estima que alrededor de 650) que presenten el formulario al BfArM para poder empezar así a cultivar su propia medicina. La decisión judicial abre una nueva etapa para los consumidores de marihuana en el país germano.