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Vídeo Dinafem: Santa Sativa

  • La Santa Sativa de Dinafem, a pesar de ser una de las primeras variedades de nuestro catálogo, no pasa de moda. Su espectacular genética sigue siendo accesible a todo tipo de cultivador. En este vídeo de alta calidad podremos admirar su vigor y sus alargados cogollos repletos de resina. 

La Santa Sativa de Dinafem es una variedad feminizada con predominancia Sativa (de un 70 % frente a un 30 % de Indica). Su particular genética se debe al cruce entre una Haze #1 y una Skunk con una Northern Lights. El resultado habla por sí solo: una magnífica planta, robusta y productiva, que es una firme favorita para todos los amantes de las cepas Haze.

Esta genética de alto nivel cumple con holgura las expectativas de los cultivadores que optan por ella. Aunque es apta para el cultivo tanto interior como exterior, en este último responde mejor en climas templados, mediterráneos y soleados. Su cosecha se realiza algo más tarde de lo habitual, sobre las últimas semanas de octubre o primeras de noviembre. A pleno rendimiento proporcionará alrededor de 1300 gramos por cada planta, que llegan a medir hasta 4,5 metros de altura.

Mientras, para quienes opten por cultivo interior, la Santa Sativa ofrece un rendimiento de 500 g/m2. Con una floración de unos 70 a 80 días, quien se decante por ella tan solo tendrá que proporcionar al cultivo la luz suficiente, así como una alimentación rica en fertilizantes. También, se aconseja controlar su crecimiento, pues tiende a estirarse en exceso y requiere de una gran cantidad de espacio para crecer.

La planta desarrollada es de estatura grande, con una estructura muy vigorosa y abierta. La distancia entre los nudos es amplia, y sus hojas son particularmente finas y alargadas. La Santa Sativa sobresale además por sus numerosas ramas capaces de soportar el peso de sus grandes, alargados y compactos cogollos cubiertos de una aromática resina que no deja indiferente a nadie. La producción de tricomas también debe destacarse, pues su sabor durante el consumo es singularmente satisfactorio.

Precisamente en cuanto al consumo de la Santa Sativa, lo primero que debe reseñarse es su marcado sabor y aroma: un verdadero cóctel con notas cítricas, a cedro, pino e incienso. Además, gracias a su alto THC (entre 16 % y 20 %), el efecto de la cepa es potente, eufórico, cerebral y de larga duración. Quien se atreva con ella disfrutará de un efecto psicodélico ideal para compartir con amigos un buen rato de diversión.

Mientras que nos decidimos a cultivarla, o mientras aguardamos el momento de la cosecha, podemos admirar la belleza de la Santa Sativa a través de las imágenes. No obstante, sus innumerables seguidores no pueden estar equivocados: merece la pena cultivarla y disfrutar con todos nuestros sentidos de sus propiedades.

05/07/2016

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